Cuando tenía seis o siete años, una amiga de mi madre me...



Cuando tenía seis o siete años, una amiga de mi madre me preguntó aquello de que qué quieres ser de mayor. Contesté cantante. Y me dijo que se refería a un trabajo de verdad. Mi madre dijo que probablemente sería periodista, como mi prima. Yo no sabía ni que era eso del periodismo, ni que eso de cantar no fuera un trabajo de verdad. Y vamos que si es de verdad. Hoy hemos echado una tarde maravillosa en el estudio para hacer un pequeño coro a un tema. Un regalazo que le hace mi queridísimo Antonio Ortuño y La Otra Banda a mi yo de seis añitos, que hoy va a soñar de nuevo con ser esa cantante que no fue, porque no era una profesión de verdad… Menos mal que por el camino descubrió otra profesión de esas que, al parecer, no lo son de verdad: el teatro (a esa edad todavía no sabía ni lo que era; no me llevaron al teatro hasta que llegué al instituto, cuando nos llevaron al Teatro de la Comedia a ver el Don Gil de Las Calzas Verdes de Adolfo Marsillach, y me enamoré de esa magia para siempre). Ahora me gustaría vivir cien vidas más, y ser cantante, actriz, directora, regidora, productora, incluso maquinista, iluminadora, figurinista, utilera… y mil cosas más, pero en plena y absoluta dedicación. Pero como no se puede, soy feliz pensando en que voy consiguiendo éstas pequeñas píldoras de sueños en esta única vida. Y a veces me llegan así, de la mano de gente que aparece en tu vida por casualidad, y llegan para quedarse. Eso sí es felicidad. Y la felicidad, si es con música, muchísimo mejor.
https://www.instagram.com/p/COTskjHFtue/?igshid=1pd0efca43d2g


from Tumblr https://ift.tt/3t8YKvS
via IFTTT

Comentarios